El origen de los ravioles es algo contradictorio, algunos dicen que fueron traídos a Italia desde China por Marco Polo y otros afirman que estos (como tantos otros manjares de la cocina italiana) tienen su origen en la isla de Sicilia.
La primera mención de este manjar aparece en los escritos de Francesco di Marco Datini (un comerciante de Venecia en el siglo XIV) y en estos había una receta de ravioles a base de hierbas verdes mezcladas con huevo batido y queso fresco que se cocinaba en un caldo (una forma muy tradicional de comer ravioles al brodo que todavía está presente en la actualidad).
Al principio, los rellenos no se usaban en los ravioles, pero entre los siglos XII y XIII se adoptó el relleno y condimentos como huevos, queso, ricotta y hierbas se convirtieron en algunos de los principales. Con el paso del tiempo, en el norte de Italia aparecieron los rellenos de carne, sin embargo, algo que nunca ha cambiado fueron sus formas, tradicionalmente cuadrados o rectángulos.
¿Amante de la comida italiana? ¡Entonces pruebe este delicioso Ravioli de 4 Quesos y pruebe los más tradicionales sin salir de la comodidad de su propia casa!
Ravioli de 4 Quesos
Ingredientes para la masa:
- 3 tazas de harina de trigo
- ½ cucharadita de sal
- 2 huevos
- ¼ de taza de aceite
- ½ taza de agua
- Harina de trigo para espolvorear
Para el llenado:
- 425 g de queso ricotta
- ½ taza y 2 cucharadas de una mezcla de 3 quesos rallados de su elección
- ½ taza de queso cheddar
- 2 huevos ligeramente batidos
- ½ cucharadita de sal
- ½ cucharadita de pimienta
Preparación del relleno:
- En una taza, coloque la ricota y tritúrela con un tenedor.
- Añada la mezcla de 3 quesos, queso cheddar, huevos, sal y pimienta.
- Mezcle todos los ingredientes con cuidado hasta obtener una consistencia pastosa.
- Cubra la taza con film de plástico y colóquela en el frigo, aproximadamente 30 minutos.
Preparación de la masa:
- Rompa los huevos en una taza y bata con un tenedor. Añada agua, aceite y sal. Mezcle.
- Añada 1 taza de harina y use un tenedor para mezclarla con el resto de los ingredientes. Añada el resto de la harina y mezcle hasta obtener una masa suave.
- Limpie una superficie grande y lisa de su encimera y espolvorear con harina.
- Retire la masa del bol, haga una bola y colóquela en la superficie de trabajo que acaba de preparar en el paso 3. Amase durante 10 minutos o hasta que se vuelva elástica.
- Espolvorear el rodillo de masa con harina y, con la ayuda de esta herramienta, estire la masa hasta que tenga un grosor de 1 a 3 cm.
- Coloque una porción de la masa ya estirada en su molde de ravioles preferido y presione suavemente hasta que llene todos los espacios disponibles.
Nota: con el resto de la masa puede hacer una bola, envolverla en film transparente y guardarla en el congelador para usar otro día. La masa se puede conservar durante unas semanas cuando se congela. Solo asegúrese de que está bien envuelta con la película, para que no se endurezca después de descongelar. - Retire el relleno de ravioles del frigo y coloque aproximadamente media cucharada en el medio de cada espacio de molde disponible.
- Llene una taza pequeña con agua, sumerja los dedos y humedezca la masa alrededor de los espacios.
- Vuelva a poner otra porción de masa ya estirada sobre el molde ya con el relleno. Presione los extremos de cada ravioli con los dedos para que pueda ver claramente su división, luego, usando el pequeño rodillo de masa de su molde, enrolle con cuidado todos los ravioles para aplanarlos.
- Dar la vuelta al molde, aplicar presión y retirar. Separe los ravioles, preferiblemente con una cuchilla redonda, similar a un cortador de pizza, pero ondulada. Asegúrese de presionar los extremos hacia abajo para que los ravioles no se rompan durante la cocción.
- Cuando termine, espolvoree harina sobre los ravioles para evitar que se peguen.
- Llene una olla grande con agua y déjela hervir.
- Coloque los ravioles en agua hirviendo durante aproximadamente 5 a 6 minutos, o hasta que floten.
- Retire los ravioles del agua con una espumadera. Cubra con su salsa favorita, ralle un poco de queso parmesano por encima y sirva.
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